jueves, 19 de julio de 2018

Rutas por la provincia de Albacete (Julio/18)



¿Por qué hay lugares en España que nunca se cogen como destino de viaje?
Por desconocimiento, por ignorancia, por unos tópicos mal infundido...¿por qué?
Tenía cinco días para pegarme una escapada por algún rincón de España, y mirando y mirando el mapa, empecé a descartar muchos lugares que ya conocía, pero en un momento dado mi mirada me llevó a la provincia de Albacete y empecé a leer y leer, y a obtener información sobre esta provincia.
Todavía hay quien piensa que en Albacete solo hay navajas y cuchillos, y es el lugar de paso para las playas levantinas ¡Que error!. Aquí voy a desmontar este tópico, porque los tópicos están para romperlos. Viajaremos por bellos pueblos, muchos de ellos declarados como conjunto históricos artísticos, recorreremos cañones, senderos, y disfrutaremos de espectaculares paisajes de montaña.
Incluso nos perderemos en el tiempo y recorreremos los lugares en donde se rodó la película "Amanece que no es poco", una de las mejores películas, en donde la risa está garantizada, con ese humor absurdo; y además, en un idílico paisaje montañoso...


Antes de empezar la ruta nos vamos a detener en su distribución geográfica. 
Son siete las comarcas, las indicadas en el mapa, siendo las subrayadas en rojos las que pudimos recorrer por  bastantes lugares o en algún punto en concreto.

-Sierra de Alcaraz y campos de Montiel:  Alcaraz
-La Manchuela: Alcalá del Júcar (con el sendero del Corciolico), Jorquera, recorrido por los meandros del río Júcar hasta Valdeganga.
-Corredor de Almansa: Chinchilla de Montearagón.
-Albacete: Albacete capital
-Sierra del Segura: Ayna y Lietor (localidades donde se rodó la película), Yeste, Letur, Nerpio (con el sendero del cañón del Zarzalar)


A la hora de dormir, escogimos cuatro puntos en donde pernoctar, muy económicos y muy variados: hostal en Alcalá de Júcar, apartamento en Albacete capital, hotel en Ayna y albergue en Nerpio.

Alcalá de Júcar
1º noche, Hostal D'Ernes, 25 €/persona con desayuno incluido


Albacete
2º noche, apartamentos Dulcinea M&S, 15 €/persona 




Ayna
3º noche, hotel Felipe II, 24 €/persona 





Nerpio
4º noche, albergue Covaroca, 16 €/persona 




¡Empezamos la ruta!
¡Ah, se me olvidaba, este viaje lo integraran mi amigo Carlos y el que escribe!

Día 1. Sevilla-Alcaraz-Alcala del Júcar

Alcaraz
 La cuna y musa de Vandelvira


Bien temprano salimos de Sevilla para aprovechar el día, pasadas las 11 de la mañana ya estábamos situado en esta monumental ciudad, cuna del arquitecto Andrés de Vandelvira, que ya en sus fechas trabajó en las ciudades de  Úbeda y Baeza  (ambas también Patrimonio de la Humanidad) y además en la Catedral de Jaén.


Titulada por los Reyes católicos como "Muy Noble y Muy Leal", Alcaraz es Patrimonio de la Unesco, ciudad cargada de historia y grandiosos monumentos.


Sin lugar  a dudas la Plaza Mayor es lo que más destaca según nos adentramos en la ciudad.
Formada por un rectángulo irregular, y en dos laterales, las lonjas distribuidas en arcadas ( la de Santo Domingo y Regatería) y dos torreones: la del Reloj (conocida popularmente como el Tardón) y la iglesia de la Santísima Trinidad.


Esta plaza, una de las más bellas de España, fue declarada como conjunto artístico en 1945. tiene un estilo renacentista uniforme con una clarísima influencia italiana.


Y junto a la calle entreiglesias, la iglesia de la Santísima Trinidad y Santa María de estilos gótico y renacentista del siglo XIV y XV.
Nos detenemos en la portada  principal y nos deleitamos con su magnífica composición de estilo gótico muy avanzado, con decoración flamígera en las arquivoltas.


Carlos, muy detallista en estos menesteres, ojea cada trocito de la portada...y se saca conclusiones. 


Hace calor, mucho calor, aprovechamos para entrar dentro de la iglesia y porque no, también para observar una vez fuera, como los "pensionistas" se refugian en unos de los laterales de la iglesia al abrigo de la sombra.


Damos por finalizada nuestra visita a la plaza y empezamos a callejear por las distintas callejuelas que desembocan a la plaza, una de ellas  con una empinada cuesta y un arco.


Pero la más importante y señorial es la calle Mayor, empezando desde la Plaza Mayor por la Puerta del Alhorí (junto al Ayuntamiento, oficina de turismo), y finalizando en un pequeño arco, que en la antigüedad la separaba del casco antiguo de la ciudad. 


Cuando empezamos a andar, ya nos topamos con nuestra primera charla, la de la señora que de forma orgullosa nos explica algunos detalles arquitectónicos de Alcaraz, y sus muchas anécdotas. 
Pues si, simplemente la quise fotografiar junto a esas columnas, y ese fue el inicio de una larga charla...Eso si "tenía que estar guapa en la foto", palabras textuales de una alcaraceña. 


En esta calle nos encontramos "la Casa de los Guerreros", la antigua casa de justicia, la casa de la Lonja, casa de los Galianos, casa de la Vicaría, la iglesia de San Miguel y ya al final de la calle "Arco de la Puerta Nueva"


Pasando este y al final de la calle (Avenida de la Constitución) llegamos a las ruinas del antiguo Acueducto, situado en el collado entre el cerro de San Cristobal y el cerro de Santa Bárbara. Y detrás, allá a lo lejos podemos contemplar igualmente los restos del castillo.



Regresamos de nuevo hacia el centro del pueblo pero ahora por las callejuelas de las partes bajas, en donde se percibe un sosegado silencio y la parte menos señorial.






Y de nuevo en la Plaza Mayor...ahora toca refrescarnos con unas cervezas, que por cierto bien frías que están...y con las correspondientes tapitas que por estos lares siempre ponen.


Alcalá del Júcar

La joya del río Júcar 



Con dirección norte, tras atravesar paisajes de pequeños cañones y una extensa planicie en las cercanías de la capital de Albacete, ya al mediodía llegamos a Alcalá del Júcar, justo cuando el sol amenazaba con altas temperaturas...y así fue.


Catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España en todas las listas en donde se habla de ello: enclave, historia, callejeo, vistas, cuevas...y muchos más, son los grandes atractivos que tiene este pintoresco pueblo.
Según nos acercamos, y desde un mirador, ya todo lo que habíamos leído se haría realidad. El enclave es espectacular.
¡Allá vamos hacia el pueblo!


Son las tres de la tarde, así que lo primero que hacemos es comernos unos bocatas en la zona alboreada de "la Playeta", junto al río y el puente romano. 


"La playeta" es el lugar de esparcimiento y a donde los alcalaeños vienen a refrescarse cuando el calor aprieta. Abundante zona verde, bares y todo lo necesario para echar un buen día a la sombra, y además con unas buenas vistas hacia los paredones del pueblo.


Tras unos buenos bocatas, y aprovechando que de aquí partía "la ruta del Corciolico" decidimos ponernos en marcha y recorrerla.


Esta ruta tiene unos 5-6 kilómetros con un desnivel de unos 150 metros.
Sin lugar a dudas su mayor atractivo son las vistas que vamos disfrutando de Alcalá del Júcar desde todas las perspectivas, y que en una progresiva ascensión nos llevará hasta la aldea de Casas del Cerro, justo en la otra vertiente del río. 


Son las cuatro y media, mala hora para empezar a andar y a subir por esas cuestas, y además con este sol achicharrante, pero es lo que hay, no dejaremos de beber y disfrutar de unas excelentes vistas hacia la hoz del río Júcar.


Una parada, y otra, y otra más...que vistas más espectaculares del pueblo, y como el río se retuerce alrededor de Alcalá del Jucar.


Allá abajo, en la arboleda, junto al inmenso espolón rocoso tenemos "la Playeta", de donde hemos iniciado la ruta.


Tras toda la subida llegamos a la aldea de Casas del Cerro, ésta perteneciente a Alcalá del Júcar con sus escasos 150 habitantes.


La ruta bien señalizada con flechas amarillas, recorren parte de la aldea para desembocar en la plazuela, en la que se encuentra una pequeña iglesia, y en el centro una escultura que homenajea a un herrero forjador. 


Y ya a la salida del pueblo, y estando muy atentos a las indicaciones empezamos a bajar de nuevo hacia Alcalá del Júcar.


Las vistas ahora las tenemos hacia las mismas casas que de forma escalonada suben hasta lo más alto del pueblo. ¡que vistas!


Una vez abajo, dimos por finalizada la ruta, y tras algo más de dos horas de disfrute, y muchísimo calor, decidimos marcharnos ya en busca del hostal y refrescarnos, para posteriormente ver Alcalá "la nuit", cosa que ya hicimos sobre las ocho de la tarde. 


Hay poco ambiente, casi desierto por la zona de los bares de la Playeta. Allá arriba, en el pueblo no hay nada, todos los bares están aquí, según nos informan. Pues allí vamos...


Pasamos de nuevo por el río, junto al puente romano, pero eso si, ahora con menos calor.
Empezamos a dar algunas vueltas por la zona mirando algún sitio donde picar algo, al final entramos en "Casa el Moli" que lo teníamos como buena referencia, echamos un buen rato en su extensa terraza al fesquito.


Y a dormir...que mañana hay más ruta.

Día 2. Alcalá del Júcar-Jorquera-Meandros del río Júcar-Chinchilla de Montearagón-Albacete

Visitando Alcala del Júcar



Nos levantamos pronto para aprovechar el día, así que no eran las nueve de la mañana cuando ya desayunados empezamos a recorrer este bello pueblo de Alcala del Júcar.


Las calles parecían aún dormidas, y lo peor era que, las cuevas a las que queríamos acceder hasta las 10,30 no abrían y el castillo a las 11.
Teníamos tiempo de sobra para patear las cuestas hacia arriba y hacia abajo.


Considerado como uno de los pueblos con mayor encanto de España, fue declarado Conjunto-Histórico-Artístico en el año 1982, por sus grandes atractivos.


El castillo fue construido por los Almohades en los siglos XII y XIII y está ubicado sobre una peña formada por la hoz del río Júcar desde donde se divisa toda la población.


Sus retorcidas callejuelas, casi todas con cuestas, nos dan una muestra clara de una típica construcción morisca. Cada pocos pasos tenemos una balconada cargada de coloridas flores con vista hacia el río y "casas del cerro", la aldea en la que estuvimos ayer.


A nuestro paso nos encontramos con un abuelete (nos encanta hablar con la gente local) que nos dice que tiene casi 100 años y todos los días viene aquí a subir por estas cuestas, y ademas, que estas fueron en parte construidas con sus propias manos.
Después cuando entramos en un bar (que por cierto alternamos un buen rato con María José, una guía local de la zona) nos comentaron que "Feliciano" que así se llama, se le ha ido un poco la cabeza y que creen que no llega a los 90. ¡De todos modos ya está bien!


Bajamos y subimos, subimos y bajamos...y así hicimos tiempo hasta que abriesen las cuevas del diablo, visita que era obligada, ya que son uno de sus mayores atractivos, puesto que Alcalá parece estar taladrada por varias cuevas.


Son tres las cuevas que podemos visitar:
-Cueva del Diablo 
-Cueva de Garaden
-Cueva de Masagó

Nosotros entramos en las dos primeras que se comunican entre si.


La entrada son 3 € y te incluye una consumición gratis.
Esta cueva tiene ya más de un siglo de historia, y de los 180 metros cuadrados que tenía en su origen, ha pasado a casi los 750 metros cuadrados gracias "Al Diablo", como así se le conoce a Juan José Martínez, el que explotó esta cueva incorporándole un bar varias salas e incluso una discoteca perfectamente acondicionada.


A lo largo de sus pasillos se pueden contemplar decenas de objetos antiguos, enseres, aperos, muchas fotografías del pueblo e incluso algunas pinturas. Está muy bien montada.





Subimos ahora hacia la cueva del Rey Garadén, para ello tendremos que superar los 92 escalones que sin mayor esfuerzo nos accede a ella. 
Es la más antigua de las dos, unos 750 años, con un largo túnel de 170 metros que nos lleva hacia una gran mirador. 
La función de esta cueva era bélica, "Era como un puesto de centinela, ya que Alcalá era un lugar de paso, para que la gente no se escabullera de pagar".



Y ya antes de salir de la cueva, nuestra recompensa, una bebida bien fresquita.


Cogemos el coche, y ya de paso antes de abandonar Alcalá del Júcar visitamos su peculiar "Plaza de Toros". Esta plaza de toros es una de las más antiguas de España y sin duda una de las más curiosas, ya que su forma irregular, que se asemeja a un estadio romano de la época de los gladiadores, la hace única. Sin una fecha exacta de su construcción, se cree que es de principios de siglo XX.



Nos acercamos ahora a Jorquera, a unos 16 kilómetros, siguiendo el cauce del río Júcar y disfrutando de los paredones y cuevas que podemos contemplar desde la misma carretera.


Jorquera

El pueblo atalaya sobre el meandro del río Júcar


Cuando planteé este viaje y vi esta foto, me impresionó y lógicamente la incluí en la ruta, ya que su enclave es sencillamente espectacular.
La pena es que esta vista no la podemos disfrutar, salvo que estemos a unos pocos de cientos de metros sobre el mismo pueblo, así que nos limitaremos a recorrerlo y a disfrutar de sus excelentes vistas hacia el meandro.


Aparcamos el coche en la parte más alta del pueblo, junto a los restos de las murallas almohades, en donde se encuentra un inmenso mirador.


Bajo un tórrido sol de verano recorrimos los restos de estas murallas. Estas se pueden observar circundando la parte alta del cerro donde se ubica la población, destacando los torreones defensivos.


En la actualidad se ha aprovechado parte de estas murallas para instalar el cementerio, haciendo de este modo que dichos restos de murallas estén mejor conservadas que las que están aisladas.


Bajamos hacia el pueblo y paseamos por sus callejuelas. No tenía mucho que ver, así que unas vueltas y para el coche.


Leyendo un poco sobre este pueblo, he encontrado esta curiosa anécdota:

 "Dicho popular que hace referencia a una anécdota acontecida con un párroco que estuvo en la localidad. El sacerdote era pelirrojo y tras llegar al pueblo, un tiempo después, empezaron a nacer muchos niños con el pelo de ese color. Empezaron las murmuraciones y el sacerdote decidió acabar con ellas desde el púlpito diciendo: "Hermanos, me he enterado de que malas lenguas van diciendo por ahí que esos niños pelirrojos que nacen últimamente son hijos míos ... PUEDE QUE ALGUNO SEA MIO, PERO TODOS NO". Por eso este refrán que hace referencia a que para atajar un problema o un murmullo malicioso, se acaba reconociendo una mala acción realizada."



 Recorriendo el meandro del río Júcar hasta Valdeganga.


Decidimos seguir por la estrecha carreterilla que nos lleva hasta Valdeganga, siguiendo el cauce del río Júcar, con su serpenteante meandro.





Este río con una longitud de 498 km atraviesa las provincias de Cuenca (naciendo aquí), Albacete y Valencia (desembocando aquí) pero...


"Porque el Júcar no siempre ha corrido en busca del Mediterráneo y hubo un tiempo en que el destino de sus aguas era el Atlántico, a donde llegaban tras desembocar en el Guadiana.
No está claro qué fue lo que determinó el cambio de rumbo, pero desde que éste se produjo, hace el orden de unos dos millones de años, el río ha labrado la espectacular sucesión de meandros encajados, que alcanzan hasta 150 m de profundidad, que se extiende desde La Jorquera hasta el embalse de El Molinar".


Según avanzamos muy lentamente (a no más de 30 km/h) cada poco tenemos que parar, coger nuestras cámaras e inmortalizar estos paredones de roca porosa y que fácilmente se desprende. 


No es de extrañar la cantidad de casas cuevas que nos vamos encontrando por el camino, muchas de ellas habitadas, otras abandonadas y otras con el cartel de "se vende". No tiene que ser fácil vivir aquí


Nosotros que vamos de paso estamos disfrutando de este paisaje tan original, distinto.


Pero quizás la edificación-cueva más curiosa es la iglesia que se ha construido junto a una pista de frontón, en donde se juegan incluso algunos campeonatos. Eso si, cuando se celebren, la carreterilla quedará cortada ya que este frontón queda justo en la misma carretera.


Tras este recorrido, y una vez que llegamos a la localidad de Valdeganga, dejamos la comarca de la Manchuela y nos adentramos con dirección sur, en la comarca del Corredor de Almansa para visitar Chinchilla de Montearagón


Chinchilla de Montearagón

La Muralla de la Mancha, cuna de culturas


Ya estamos cerca de Albacete capital, a solo 13 km, miramos a nuestro alrededor y vemos una extensa llanura, la mancha albaceteña, pero por un  momento nuestra mirada se fija en el horizonte, y allá a lo lejos vemos un cerro que destaca de forma notable en esa llanura, y coronando este cerro un majestuoso castillo, el castillo de Chichilla de Montearagón, hacia allí nos dirigimos. 


Declarada como Conjunto Histórico Artístico por su gran riqueza monumental y por una larga  historia. En 1822 fue creada como provincia española comprendiendo territorios de Murcia, Cuenca, La Mancha, e incluso Ciudad Real, desapareciendo como tal en octubre de 1823. La provincia de Chinchilla fue el precedente de la provincia de Albacete en 1833. De hecho se la conoce como el Albacete de su parte antigua y su caso histórico, ya que se encuentra a solo 13 kms de distancia. 


Esta villa de trazado medieval, como se ha podido comprobar está enclavada en lo alto de un cerro, desde cuya cima domina la llanura manchega.  


En el centro de la ciudad se encuentra la Plaza Mayor en la que se encuentra el Ayuntamiento, construido entre los siglos XVI y XVIII, la Torre del Reloj y la iglesia de Santa María del Salvador del siglo XV y XVI.


Tras visitar estos edificios nos trasladamos con dirección al Castillo, pero sin antes dejar de disfrutar del callejeo que nos dirige hacia el.


Una vez arriba, las dimensiones del castillo nos impresionan, y desde donde podemos disfrutar de hermosas vistas.


Este castillo de origen árabe, se trata de un antiguo emplazamiento ibérico y más tarde romano y ocupado posteriormente por los Visigodos.


Durante casi tres siglos, esta fortaleza fue usada como prisión, motivo por el cual presenta su actual forma. Sirvió de cuartel durante la Guerra de Sucesión Española y para las tropas Napoleónicas durante la Guerra de la Independencia Española.


El castillo está rodeado de un profundo foso con talud inclinado, tallado en la misma roca, lo que aumentaba la altura de sus ya elevados muros. El foso tiene unas medidas de seis metros de profundidad por diez metros de ancho. 


Abandonamos el castillo y nos dirigimos callejeando en parte por la "ruta de la Muralla" buscando las Cuevas del Agujero.


Esta zona sin ser nada monumental y sin ser parecida a las calles de la Plaza Mayor, tiene su encanto.
Estrechas callejuelas nos desembocan en la iglesia de Santa Ana, en donde una pequeña plazuela la enmarca en una bonita estampa.


Y poco a poco seguimos descendiendo hasta llegar a las zonas de las casas cuevas, siendo las mas importantes la del Agujero 


Estas cuevas se encuentran al pie de la muralla enmarcadas con unas curiosas chimeneas blancas que dividen el espacio exterior mientras que el interior es excavado en la roca.


Tras un paseo junto a estas casas cuevas, abandonamos Chinchilla y nos dirigimos hacia en Albacete.
Ponemos nuestro GPS y nos llevará directamente a los apartamento que ya habíamos reservado. En quince minutos ya estábamos allí.


Albacete


Aunque en un principio no teníamos idea de llegar a Albacete...pero ya que estábamos a solo 13 km decidimos pernoctar aquí e irnos de copas, puesto que habíamos leído que era un buen lugar para hacerlo, y además visitar algunas cosillas interesantes, y sobre todo, tener una opinión propia sobre esta capital poco visitada.

El apartamento que cogimos un 10, super barato, bien situada y con todos los servicios, recomendable.


Para tapear, y con mucho ambiente de terrazas y bares tenemos que situarnos en el corazón de Albacete, en las calles Concepción, Gaona hasta Jesús Nazareno y la calle Tejares. Nosotros según habíamos leído, nos acercamos al bar "Tejares 10" que es así como se llamaba, aunque ahora han cambiado de dueño y se llama "Asador Sidrería del Sur", es el bar de tapas más antiguo de Albacete.
El ambiente y las buenas tapas están servido, y además a buen precio. 


De ida y vuelta a nuestros apartamentos visitamos un poco "Albacete la nuit" pudiendo observar interesantes edificios, aunque mañana bien temprano daremos otra vuelta para rematar la visita.


Día 3. Albacete-Ayna-Liétor-Ayna


Visitando Albacete

Albacete es una curiosa ciudad, en donde no hay absolutamente nada de parte antigua, todo es moderno, por lo tanto lo único que podemos es disfrutar de algunos de sus monumentos. Incluso su Catedral se encuentra ubicada en una zona moderna.


Escultura del Cuchillero ubicada en los jardines del Altozano, rinde homenaje a este sector tan importante en la historia de la capital. Fue inaugurada en 1998, realizada en bronce, representa al típico cuchillero albaceteño ofreciendo las navajas de Albacete con su cinto lleno d navajas.


El Gran hotel de Albacete es una construcción modernista de principios del siglo XX, con una fachada ecléctica, alternando también los estilos renacentista, gótico y plateresco.


El Pasaje de Lodares, es una histórica y monumental galería comercial y residencial, con semejanza a las galerías italianas perteneciente a la arquitectura modernista de principios del siglo XX.
Según el diario El Mundo, la catalogó como una de los pasajes más bellos España, icono de la ciudad.





Casa Cabot, construida entre 1922 y 1924 es un edificio señorial de estilo modernista situada en la calle Ancha. Posee una fachada de alto valor arquitectónico en donde sobresale la  arquitectura barroca.



La Catedral de San Juan Bautista se empezó a construir en 1515 sobre un templo mudéjar, pero en 1949 es cuando se concluyó con su aspecto actual, con su exterior de estilos Neorrómánico y Neogótico. 


En su interior presenta tres naves y tres tramos separados por unas elegantes columnas jónicas de casi 14 metros de altura. Sus tres grandes vidrieras representan, la del centro a San Juan bautista, y las laterales la Visitación y el bautismo de Cristo. 





El Museo de Arte de la Cuchillería es un palacete de principios del siglo XX. 

"Es una institución museística única en el país y forma parte, junto a los de las ciudades de Solingen (Alemania) y Thiers (Francia), del grupo de los tres museos europeos dedicados a la cuchillería en Europa, unidos bajo la declaración de Albacete en defensa del sector cuchillero con el lema:
 «tres ciudades, tres museos, tres países»"



Casa de Agustín Flores, este emblemático edificio ecléctico con toques modernistas fue proyectado como vivienda de lujo. Terminado en 1916, posteriormente albergó el casino, dando el nombre de Montecasino.


Subdelegación  de Defensa, construido en 1920 es un edificio de esquina en el que destaca su torre circular que hace de unión entre las distintas fachadas del edifico.


Depósito del Sol,  construido en 1921 es un edificio cilíndrico de 13 metros de altura en dos pisos, cuerpo principal al que se le adosa una escalera de caracol, en su origen utilizada para el control del agua. Actualmente en este depósito hay instalada la biblioteca.


Tras un par de horas de visita, partimos hacia el sur con dirección Ayna, ya en la comarca montañosa de Sierra del Segura.

Ayna

La Suiza Manchega


En enero de 1989 se rodó una de las películas españolas hoy considerada como una verdadera obra de arte del humor absurdo. Tres fueron los pueblos albaceteños en los que tienen lugar sus localizaciones (Ayna, Liétor y Molinicos). Son tantos los seguidores de esta película que en el 2010 se creó un grupo de forofos de este film y que se hacen llamar AMANECISTAS, en la que todos los años se reúnen en forma de "quedada" para recordar esta fantástica obra creada por un genio del absurdo. En los tres pueblos podemos realizar la ruta de "Amanece que no es poco".

Nosotros visitamos dos: Ayna y Lietor

Cuando llegamos a Ayna lo hacemos de la mejor forma posible, haciendo una parada en el mirador del diablo, siendo este punto uno de las escenas donde se rodó la película, y pudiendo disfrutar de unas impresionantes vistas del pueblo y del paraje que la rodea.



Este mirador se encuentra a 1,5 km del pueblo y el paisaje que avistamos es el llamado ""Estrecho del Gargantón", siendo este un enclave de gran espectacularidad.



Una vez que hemos disfrutado de las vistas bajamos hacia el pueblo en el que ya realizaremos la ruta AMANECISTA, pero antes de llegar haremos la correspondiente parada en el famoso sidecar de bienvenida al pueblo.


Y aquí incluyo el mapa y cada uno de los puntos en los que se rodó la película, y que uno a uno lo iremos siguiendo:


1. Los futuros líderes del poder omnímodo llegan al pueblo.

2. Viajando en sidecar.

3. Semillero de hombres.

4. Ópera en la taberna.

5. El hombre razonable.

6. ¡Qué buen maestro es usted, Don Roberto!

7. El Cuerpo Místico de Cristo.

8. Extraños sucesos de la zona.

9. Calabaza tú siempre has estado en los momentos difíciles.
10. Unos días van en bici y otros huelen a lomo de ángel.
11. ¡Con la colaboración de Dostoievsky!
12. El suicida.
13. ¡Te ha salido un hombre en el bancal!

14. ¡Amanece que no es poco! 


Ayna es muy pequeño, prácticamente una sola calle principal que atraviesa el pueblo.
En cada casa nos encontramos una fotografía de cuando se rodó la película con los distintos personajes: niños, ancianos, agricultores, camareros...el pueblo participó en pleno en el rodaje.


La Plaza Mayor es el epicentro del pueblo desde donde entra y sale la calle principal, desde donde podemos contemplar unas picudas formaciones rocosas que sobresalen por encima de las casas.


De todas las escenas, quizás las más simpáticas son las rodadas junto al río Mundo: "3-Semillero de hombres" y "9-Calabaza tu siempre has estado en los momentos difíciles"...hacia allí nos dirigimos.


La bajada al río no está bien indicada, con lo que son varias las veces que nos equivocamos, metiéndonos incluso casi en la casa de esta señora. Menos mal que nos indicó la bajada correcta...todavía podíamos estar dando vueltas.


3-Semillero de hombres


9-Calabaza tu siempre has estado en los momentos difíciles



1-Los futuros líderes del poder omnímodo llegan al pueblo

Siguiendo por el carril que continúa paralelo al río Mundo alcanzamos la cascada de la Toba, bonita caída de agua, con unas vistas espectaculares hacia los paredones que rodean al pueblo.


Junto a esta cascada se rodó otra escena de la película:
"7-El cuerpo místico de Cristo", por mucho que miramos no conseguimos localizarla, sería esta...





Desde toda la orilla podemos contemplar unas "vistas que quitan el sentido", y nuestro hotel en una joya de mirador natural hacia el río y el pueblo.





Es mediodía, hace muchísimo calor, así que aprovechamos para subir al pueblo y refrescarnos con unas cervezas, ¡y a ver que nos ponen de tapita!


Y ponemos rumbo hacia nuestro hotel, el Felipe II.
Una vez dentro nos asomamos a la enorme terraza que ya veíamos desde el río.
¡Vaya vistas!

Una buena ducha, un poco de descanso y a Liétor.



Liétor

La Cresta de la Roca


1. El pueblo entero está en misa. ¡Un llenazo!
2. ¡Un presbítero admirable!
3. Asamblea de mujeres.
4. Carmelo en su versión ebria.
5. Carmelo en su versión sobria.
6. Asamblea de mujeres para designar las candidaturas.

He aquí el otro pueblo que sirvió de escenario para la película, situado a unos 20 kilómetros de Ayna.
Colgada sobre la hoz del río Mundo, Liétor nos impresiona con los cimientos excavados en la roca y las casas asomadas sobre el río.


Este es uno de los pueblos que más nos impresionó, por su belleza y por sus laberínticas callejuelas, que en más una ocasión nos recordó a muchas calles de Sevilla.


En su entramado callejero, adaptado al terreno pendiente de la roca, esta población es una de las más bellas de toda la provincia de Albacete.


 Empezamos a andar desde la Plaza Mayor con dirección  a los miradores hacia el río Mundo. Las callejas estrechas, muchas curvas, otras serpenteando, pero todas con mucho atractivo.


Todas (o casi todas) las casas están pintadas de igual color, un tono ocre, claro algunas de las fachadas y otras con un color más apagado...el conjunto de ellas hacen que mi cámara no deje de disparar. Un clic, y otro clic...y a la vuelta de esa esquina el penúltimo clic.


A la vez que vamos disfrutando de su callejeo, localizamos las escenas de la película de 
"Amanece que no es poco".


3. Asamblea de mujeres.
5. Carmelo en su versión sobria.
6. Asamblea de mujeres para designar las candidaturas.


Hacemos un alto en el camino y nos detenemos en una de las terrazas que hay en la Plaza Mayor para tomar unas cervezas, aprovechando la charla que estábamos teniendo con una de las señoras del pueblo. ¡Vaya como se lo sabía todo!, claro había sido guía turístico.


Por último visitamos la calle que nos lleva hacia la curiosa Plaza de Toros que se encuentra inmersa en una de las calles laberínticas de Liétor. ¡Curioso!


Por la parte trasera, y con dirección a la Ermita de Belén, las callejuelas nos siguen impactando...
¡que pueblo más bonito!


Y antes de partir de nuevo con dirección a Ayna, ahí esta Carlos intentando deducir cual la calleja por la que tenemos que tirar para salir del pueblo.


Y de nuevo en Ayna, ya pasadas las nueve de la noche

Una buena ducha y a cenar en el mismo restaurante en donde estamos alojados, un buen menú y baratito. Y como no, ahora toca disfrutar de este cielo estrellado desde esta inmensa balconada que mira hacia las pocas luces que hay iluminadas en el pueblo.


Mañana más ...

Día 4. Ayna-Yeste-Létur-Nerpio

Éramos conscientes que nos faltaba por ver uno de los tres pueblos del rodaje de la película, MOLINICOS, y al igual vimos en el mapa que quedaba por el sur, cerca del lugar por el que nosotros tendríamos que pasar con dirección a Yeste.
-Ya veremos, si nos podemos desviar para verlo, lo haremos y sino seguiremos de largo, eso fue lo que pensamos.
Al final no nos desviamos, eran otros 20 km de ida y otros de vuelta.
¡Continuamos!

En cualquier caso dejo el mapa y los lugares donde se grabó.


1. Jimmy y su hijo Teodoro llegan al pueblo.
2. Desdoblamiento de Carmelo.
3. Personaje sin personaje.
4. El Alcalde se ahorca en la sala de juntas.
5. El libre albedrío.
6. El pueblo se niega a hacer “flash-back”.
7. Tras celebrarse las rogativas llueve arroz de Calasparra.
8. Votaciones.
9. Levitación de Paquito.
10. Los de siempre ganan las elecciones.

La carretera que sale de Ayna bordeando el río Mundo es sencillamente espectacular.


Era obligatoria la parada desde el Mirador de los Infiernos, a la altura del 
pequeño pueblo de Royo Odrea.



Y algunos paisajes que vamos encontrando por el camino...



Yeste

Tierra de Frontera


Cuando entramos en Yeste lo que destaca de forma majestuoso es el imponente castillo que junto con la iglesia de la Asunción nos da una primera fotografía perfecta de forma escalonada.


Lo primero que hacemos es dirigirnos a la oficina de turismo, que por cierto está dentro del mismo castillo, una vez informado con plano en mano y los horarios, entramos a visitar el castillo (3 €) 


Este castillo enclavado en lo alto de un promontorio es musulmán, del siglo XII, perteneciendo más tarde a la orden de Santiago.


En el interior de la fortaleza destaca un patio de armas columnado de doble galería; la inferior con columnas de estilo gótico tardío y la superior construida en madera.




Subimos hacia uno de los torreones rectangulares del siglo XIII, al que se le añadió la muralla para contener su población, crecida a su amparo.


Una vez arriba, podemos disfrutar de las vistas del pueblo, y además del entorno montañoso con muchas zonas verdes. De hecho, en esta zona son muchas las rutas de senderos que podemos realizar.


Los árabes ya hicieron de Yeste la fortaleza más importante de la Sierra del Segura.


En el interior del castillo podemos comprobar a través de una maqueta, como entonces era el pueblo rodeado totalmente por la muralla. 


Salimos ya del castillo y bajamos con dirección a la Parroquia de la Asunción, edificio religioso que fue construido a lo largo del siglo XVI, aunque no pudimos entrar por encontrarse cerrada.


Y ahora tocaba callejear por el pueblo llegando hasta el final del mismo.
La idea que teníamos era poder tener unas buenas vistas del castillo junto con la iglesia, y la conseguimos subiendo hacia la misma carretera.



Aunque no nos resultó un callejeo muy grande, si tiene algunos rincones dignos de admirar, sobre todo una de las calles principales que atraviesan el pueblo y que se bifurca en dos, dejando en el mismo centro el perfil de una de sus casas.


Continuamos un poco más hacia adelante y nos encontramos con la misma estructura de calle que la anterior, aunque en este caso mucho más estrecha.



Desde cualquier punto del pueblo tenemos preciosas vistas hacia el castillo, ya que de forma imponente destaca por encima de todas las casas.


Hora de comer, lo tenemos fácil, un supermercado, unos bocatas, fruta y como no, una cerveza bien fresquita, y en la primera sombra del pueblo, a comer.



Tras casi tres horas de visita, ponemos rumbo hacia nuestro siguiente destino, Létur, justo cuando el calor empezaba a azotar fuertemente.



Letur

Callejuelas del Mudéjar: Naturaleza, Piedra y Agua


Uno de los pueblos más hermosos y con más atractivos de la provincia de Albacete, de ahí que esté declarado como Conjunto Histórico Artístico.


Agua, agua, y más agua por muchos rincones del pueblo, con piscinas naturales, fuentes...antiguos molinos. Un paraíso rodeado de aguas cristalinas.



Cuestas, arcos y portales, callejuelas tortuosas y estrechas...




 

Vertiginosos miradores, balcón natural que se asoma sobre huertos de hormas árabes. Mirador de la Molatica...



Létur, encaramado al paisaje de la Sierra de Segura, es uno de los conjuntos islámicos de Albacete que más impresionan al viajero. 
Tal como nos indica una información de la oficina de turismo:

"Letur es arte forjado en piedra, Enclavado en un entorno privilegiado, la villa de Letur conserva uno de los cascos históricos más rico y fascinante de la provincia de Albacete".


Muchos son los pueblos que han pasado por aquí: Íberos, romanos, árabes, cristianos...
Pero la cultura que ha dejado mayor huella en la fisonomía actual de Létur ha sido la musulmana. 


El trazado urbano es de tradición andalusí, forjando su impronta en el trazado de sus calles, sistema de regadío como acequias, balsas de riego, hormas...


Todo Létur es un conjunto arquitectónico realizado en tapial, a base de tierra, agua y cal, junto con piedra, madera y caña con grandes muros blancos  de escasa decoración.


 La Plaza Mayor es la parte más alta de la villa, y es donde se encuentra la iglesia, junto a ésta y en la parte trasera, las callejuelas se retuercen con arcadas buscando los muros de la iglesia. 


Y efectivamente, nos trasladamos y callejeamos por sus cuestas, y en muchas de las fachadas las macetas cuelgan de las rejas de los balcones de las casas. 


Maravillado quedamos de este bellísimo pueblo.
¡Que error más grande no querer incluir a la provincia de Albacete como uno de nuestros destinos, al igual que otros tantos de España! 


Poco a poco, y con mucha pena vamos abandonando este pueblo para dirigirnos ahora hacia nuestro último destino del viaje por Albacete, Nerpio.




Para ello nos dirigimos hacia la zona mas al sur de la provincia de Albacete, haciendo ya límite con las provincia de Jaén, Granada y Murcia, en lo que se conoce geográficamente como el
 "Tacón de la provincia"


El paisaje se hace más montañoso, y las curvas son frecuentes..


Nerpio

Entre la Historia y la naturaleza


Cuando llegamos a Nerpio lo primero que hacemos es dirigirnos a la oficina de turismo para informarnos sobre el horario de visita para las Pinturas Rupestres al día siguiente (domingo). 
No hemos tenido suerte, se han suspendido porque habrá una competición de carrera de bicis, y los de turismo tienen que estar allí.
Nos dan el plano, lo que hay que ver y la ruta de sendero que ya teníamos planteada por el cañón del Zarzalar por el río Taibilla (¡mañana la haremos!) 

Nos vamos primero a nuestro alojamiento (habíamos quedado a las 18:30) el albergue-cortijo Cavaroca, a unos 5 km de Nerpio, por una estrecha carreterilla.

 

Y nos instalamos en nuestra habitación compartida con literas.
Tenemos suerte, solo estaremos nosotros en la habitación.


Una ducha, vestidos ya de "guapos"  y a visitar el pueblo de Nerpio.


Con un pequeño callejeo se puede ver el pueblo, no tiene mucho más. Aquí lo importante es la naturaleza, con sus rutas, y las pinturas rupestres.


Aún así en una de las callejuelas entablamos conversación con varias familias que estaban en la calle tomando el fresco. Nos contaron un poco de la historia del pueblo y de que muchas de las casas están construidas en parte dentro de las cuevas.


Una de las señoras nos invita a su casa para mostrarnos el interior de esa cueva (la de su padre). Ahí está el Carlos intentando coger alguna de las muchas patatas que el abuelo tenía.


Un poco más de callejeo y lo que tocaba ahora es comer en algún bar-restaurante. Por recomendación de las familias, nos mandaron a uno de ellos.
Bien harto de tapeo, ahora tocaba dormir, mañana tendremos ruta...



Día 5. Nerpio (ruta del cañón del Zarzalar)-Sevilla

Ruta del cañón del Zarzalar



Esta ruta de unos 10 km nos llevará a través del cañón del Zarzalar siguiendo el río Taibilla hasta Villa Carmen y el cortijo del Tovarico.
Con unos 200 metros de desnivel, unas dos horas y media o tres yendo en plan muy tranquilo y disfrutando. MIDE 2122. Aunque la ruta puede ser circular, nosotros la hicimos de vuelta de nuevo por el río, nos parecía más amena que no buscar la carretera de vuelta a Nerpio.


La ruta la iniciamos en la plaza mayor del pueblo, y junto a la iglesia, atravesamos una estrecha calleja con una arcada, iremos bajando, y en cinco minutos llegamos a la estación depuradora.



A los pocos metros ya estamos situados en la misma orilla del río Taibilla, atravesaremos un puente con tronco de madera, y a partir de aquí se inicia el sendero.




El agua durante siglos ha ido horadando este paisaje a través del río Taibilla, formando el conocido como Cañón del Zarzalar.



Serán muchas las oquedades y cuevas que nos iremos encontrando por el camino, algunas de ellas, incluso tenían pinturas rupestres, pero poco a poco la han ido expoliando.


 Durante todo el trayecto serán muchas las veces que iremos cruzando el río en un sentido y otro a través de pequeños puentes con troncos de madera, pero el más largo sin duda, es el puente colgante que nos encontramos casi al inicio.


Y aquí viene una de las pasarelas más divertidas, apoyándonos en unas cadenas instaladas en la mima pared de la roca la iremos superando. 



El sendero sigue discurriendo junto al río y vadeándolo sin parar de atravesar los pequeños puentes.
Al atravesar uno de ellos llegamos a un enorme covacho en donde posiblemente aquí vivieron algunos de nuestros antepasados.


El cañón ahora se abre, y la vegetación de ribera (zarzas, juncos, mimbreras, chopos y álamos...) la tenemos durante todo el recorrido.


En una de las paredes, una gran oquedad ha sido cubriera y habilitada, posiblemente para el ganado.


Al poco llegamos a la presa con una pequeña cascada.


Y a partir de aquí entre las arboledas, iremos transitando junto unas acequias.


En el último tramo y a cielo abierto, un enorme espolón de roca en forma picuda sale a nuestro encuentro.


Y ya muy cerca llegamos a la zona conocida como Villa Carmen y el cortijo del Tovarico.



Accedimos por la parte baja, junto a los álamos y chopos, Villa Carmen queda arriba, a la vuelta pasaremos por sus puertas.


Parecía estar abandonado, cuando de pronto "Sorpresa" un bar, vemos el cartel de Cruzcampo.
Pero no era un bar, era una propiedad privada...nos acercamos y empezamos a charlar, al poco ya teníamos unas cervezas fresquitas en nuestras manos. Entre charla y charla se nos fue media hora de cervezona. Buena gente, eran de Almansa, y allí se reunían en familia.


Si a la ida tardamos casi un par de horas, la vuelta, por el mismo río, la hicimos en una hora, prácticamente sin detenernos.


Una vez en Nerpio, ya mediodía, unas cervezas con tapas y de vuelta hacia Sevilla, a la que llegaríamos sobre las nueve de la noche.


Un estupendo viaje con duración de 5 días, en donde hemos podido disfrutar un poco de todo: bellos pueblos, espectaculares vistas de montañas, senderos, cañones.
Gente cordial, amable y que al poco se hace de una charla amigable.
La provincia de Albacete es la gran desconocida, no es solo la mancha albaceteña, aquí he intentado desmontar ese gran tópico en el que dice:
¿Albacete, donde está? ¿Que hay que ver allí?