miércoles, 25 de mayo de 2011

Subida al puerto de Candeleda (Gredos-2088 m) Mayo/11



He aquí la subida al Puerto de Candeleda, que con sus 2080 metros de altura lo conseguimos coronar tras patear durante 12 horas, 30 kilómetros y casi 2000 metros de desnivel acumulado, y además con tromba de agua incluida.



Nos situamos en la localidad de Candeleda (Avila),  en la plaza de Santa Beatriz de Silva y junto al convento

 de las hermanas Franciscanas iniciamos  la ruta.

Son las 9,30 a.m, el cielo cubierto de nubes, incluso con una pequeña llovizna. Estamos a unos 430 metros de altura.
Tras avanzar por una pista de unos tres kilómetros, iniciamos el sendero por un pequeño bosquete de robles, estamos en la trocha real.
Como era previsible, empieza a llover, es  mas cae un agua torrencial


Bien protegidos por nuestros chubasqueros, seguimos avanzando casi sin inmutarnos. Aunque algunos plantean la posibilidad de regresar.



Tras una hora y media de marcha llegamos a un hermoso río que con gran fuerza arrastra sus aguas


A las 11,30 y tras dos horas de marcha, llegamos al puente romano el puerto (660 m). Aqui hacemos una paradita de quince minutos. El tiempo por suerte se empieza a despejar.



A partir de aquí empieza la verdadera ascensión, cada uno a su ritmo, el aliento a veces falta y tenemos que parar. Durante unos quince minutos avanzamos por un senderillo que al final nos desemboca a una pista.
Son varios senderillos a izquierda y derecha, pero al final todos desembocan al mismo sitio


La pista se hace interminable, algunas rampas se hacen realmente duras por su fuerte pendiente. Aquí cuatro compañeros deciden volver. De ese modo 11 socios seguiremos hasta la cumbre.

En cuatro horas llegamos a un chozo, que hace a su vez de refugio (1150 m ). Una pequeña parada para retomar el aliento y acontinuar. 

A partir de aquí la arboleda desaparece y solo los piornos nos acompañran durante este tramo


El sendero está perfectamente indicado por postes indicativos. Seguimos avanzando, la subida nunca termina. A ambos lados, vemos dos impresionantes gargantas, y en una de ellas los grandes picos de Gredos.


A nuestro paso dos imponentes cabrones se dejan aparecer, y muy agradecidos ellos nos dejan poder fotografiarlos

 

Al final vamos a tener suerte con el tiempo, ya que el cielo cada vez está mas despejado, y aprovechamos para disfrutar de unas excelentes vistas

 


Ya hemos llegado, este montón de piedras nos marca la puertea de entrada al puerto de Candeleda





La idea era llegar hasta el pico Morezón, pero lo vemos difícil, queda todavia mucho por llegar y ya es tarde.

Ya hemos llegado al Puerto de Candeleda, hemos tardado casi seis horas y media, 15 km y unos 1600 metros de desnivel


Tras una agradable comida y con unas vistas espectaculares, sobre las 16,30 empezamos a bajar.







Ya estamos cerca de nuestro fin. La ruta ha sido dura. Dos compañeras van lesionadas y han tenido que parar cada poco tiempo.

Estamos en la fuente el zauce, ya casi estamos en la pista de bajada.

Por fin ya estamos en los coches. son las 21,30. 12 horas de ruta, no esta mal para pasar este  domingo de Mayo.

sábado, 14 de mayo de 2011

Ruta por el Alentejo portugues (abril/11)








Al sur de Portugal, después del río Tajo (Além do Tejo, en portugués) hay un extenso llano que se llama el Alentejo




RUTA POR EL ALENTEJO


Itinerario seguido durante cuatro días



Entrada a Portugal por la cacereña localidad de Valencia de Alcántara.



Día 1:

Dentro del Parque natural de San Mamede, visita de los pueblos de:

-Marvao y -Castelo de Vide

Visita de Estremoz

Llegada por la tarde-noche a Évora

Día 2:

-Visita de la ciudad de Évora (patrimonio de la humanidad)

-Visita al Complejo megalítico de dos Almendres (Cromlech de menhires dos almendres)

Día 3:

-Visita de Monsaraz

-llegada a Beja y visita

Día 4:

-Visita de Mértola

-Parque natural do vale do Guadiana: aldea de Amendoeira do serra, cascadas de Pulo do Lobo y molinos dos canais y da brava




MARVAO



Ubicado en una cresta rocosa casi “al borde del cielo”, Marvao ha servido de reducto defensivo para pueblos que desaparecieron en la bruma de los tiempos.

Aquí arriba, tras las murallas disfruto de unas excelentes vistas del parque natural de San Mamede, y remontándome siglos atrás paseo por sus callejuelas, sus plazuelas y sus fuentes como si el tiempo se hubiera detenido.






















CASTELO DE VIDE






Ubicado en el corazón del parque natural de San Mamede, y rodeado por un verde y hermoso paisaje, este pueblo puede presumir de tener un bello barrio judío.

Rodeado por murallas, y en su parte más alta el castillo preside elegantemente todo el pueblo.

Fonte de la vida, Igreja de San Francisco, Porta de la vida, la sinagoga. Son algunos de los lugares que nos podemos encontrar en el ir y venir por las callejuelas de Castelo de Vide.














ESTREMOZ

Estremoz está rodeado de una muralla y dominada por un castillo medieval.

Las calles más típicas se sitúan en la alcazaba medieval, constituye lo que fue la ciudad antigua del siglo XIII, esta rodeada de impresionantes baluartes, la mejor forma de llegar a la zona monumental es a pie siguiendo la estrecha Rua da Arandina que sale desde la Praça de Luis Camöes.













ÉVORA



Ebora Liberalitas Lulia. Este fue el nombre  que lle pusieron los romanos cuando la fundaron.
Ciudad histórica y  heredera de un rico y variado patrimonio cultural, construido y preservado por todo el tiempo. La ciudad fue fortaleza que consolidó, en Álem-Tejo, la formación del nuevo reino de Portugal durante la Reconquista cristiana peninsular del siglo XII.  El patrimonio histórico y artístico que se conserva en la ciudad ha resultado en buena parte de la larga permanencia de la monarquía portuguesa. El conjunto monumental que esos tiempos han dejado á la ciudad y la construcción urbana de aspecto popular, están en la base de la clasificación de Évora como Patrimonio Cultural de la Humanidad, desde 1986.

En su callejeo podremos visitar  la catedral, conventos, iglesias, foro romano, acueducto, museos, plazas, soportales y un sinfin de detalles que nos iremos encontrando durante su recorrido.
Y por supuesto a la hora de la comida degustaremos excelententes platos típicos de la zona, y de postre, variados y sabrosos dulces.

Esta ciudad, rodeada totalmente por una muralla, requiere de un día completo para visitarla. Pasear por sus calles nos remontaran a época romana.






























CROMLECH DOS ALMENDRES





A unos 12 kilómetros de Évora nos encontramos con este curioso recinto megalítico. Es el mayor monumento de la península Ibérica y uno de los monumentos más antiguos de la humanidad.

Fue aparentemente construido hace 7000, en los albores del neolítico.

El recinto de los Almendres cuya planta original tenía planta de herradura, abierta al este, y parece haber sufrido ampliaciones y remodelaciones.

Actualmente, cuenta con casi de 100 monolitos, algunos de ellos decorados.
















BEJA




Beja, la antigua Pax Julia, es una ciudad cargada de historia. Dice la leyenda: “Mucho antes de los lusitanos, el lugar donde hoy se encuentra la noble ciudad de Beja se hallaban sus murallas romanas, sus edificios góticos, su mezquita árabe , su castillo de principios de la monarquía portuguesa”.

Tuvo gran riqueza bajo el dominio romano, como lo comprueban las piezas que se encuentran en el Museo Rainha D. Leonor, o las puertas de Évora y de Avis.

Sin lugar a dudas el monumento más popular de Beja es la torre del homenaje, que hoy todavía, se puede contemplar en la planicie y que marca la imagen de la ciudad.

…….. Y para dormir, sin lugar a dudas Residencial Bejinense. Original, único, con un gusto exquisito. Y como guinda de la perfección, su dueña, trata al residencial como su propia casa, y así lo demuestra y lo transmite a sus huéspedes. Con mimo, con cariño …………


















MONSARAZ




Un día lluvioso, a momentos torrencial. La niebla invade la carretera que nos dirige a Monsaraz. Es muy temprano. Esperemos poder desayunar en este lugar.

Bajo unas murallas que apenas podemos distinguir, la lluvia sigue insistiendo, y nosotros por fin nos decidimos a salir, tras aparcar bajo este castillo nebuloso.

La puerta de la villa nos adentra a este mágico lugar. Son solo dos calles las que hacia arriba y hacia abajo discurren por Monsaraz. Y en un extremo, el castillo.

El pueblo está dormido, todo está cerrado. ¡Qué ganas tengo de tomar café!.

Paseamos en el silencio de la mañana, donde la fuerte lluvia ha cesado y solo cae una pequeña llovizna. Las calles empedradas, las paredes encaladas de un blanco intenso. Algunas tienen un toque añil.

Por fin, éste si está abierto. Café por favor y una tostada si puede ser.

Ahora sí, el pueblo está despertando. Ya se ve gente por las calles. Son casi todos turistas. ¡Qué diferencia!

Monsaraz, situada sobre una colina y rodeada por unas esbeltas murallas. Esta villa surgió a partir de una coyuntura de prosperidad, en la cual la población aumentaba y sobrepasaba los propios límites de la zona intramuros. Su posición estratégica permitía detectar el enemigo a través de la red de atalayas envolventes.

Tal como vinimos nos vamos, una fuerte tromba de agua nos cae antes de abandonar Monsaraz.


























MÉRTOLA


Se extiende sobre las dos riveras del Guadiana. Engalanado en una colina su castillo, y hacía el río, sus calles empedradas, sus estrechas callejuelas, sus rincones moriscos y sus casas encaladas.

Mértola, son uno de esos pueblos difícil de olvidar. Desde su castillo podemos divisar unas magníficas vistas del pueblo: su mezquita (ahora iglesia parroquial), su entramado de callejuelas, y el río, que vemos como en un serpenteo rodea al pueblo.

















PARQUE NATURAL DO VALE DO GUADIANA
Como aquella Portugal que conocí  por primera vez hace muchos años: rural, tranquila, silenciosa.
Esta zona, por suerte poco conocida, tiene un bello paisaje cerca de España y buscando siempre las aguas del fronterizo río Guadiana.

En el témino de Mértolas y cerca de la aldea de Amendoeira do Serra, se encuentra uno de los principales atractivos , Pulo do Lobo, donde las aguas del Guadiana caen cerca de 20 metros de altura a través de uma garganta rocosa.