domingo, 23 de abril de 2017

Ciudad Encantada de Cuenca (Diciembre/2009)




En esta ocasión Rosa y yo aprovechamos una escapada de cinco días para hacer una parada en este bello lugar antes de proseguir con nuestras subidas a los "techos de España", que en este viaje serían las cumbres de Cuenca, y las de Teruel; además visitar la Serranía de Cuenca, Albarracin, nacimiento del río Cuervos y distintas localidades de la provincia de Teruel.



Información obtenida de la web oficial de "Ciudad encantada"

Situada en la localidad pedánea de Valdecabras (CUENCA), en pleno corazón del Parque Natural de la Serranía de Cuenca y rodeada de inmensos pinares, la Ciudad Encantada es sin duda uno de los parajes más espectaculares de nuestro país, donde podrás conocer y aprender el proceso geológico del karst y admirar sus caprichosas formaciones. Por ello, la Ciudad Encantada fue declarada Sitio Natural de Interés Nacional el 11 de junio de 1929.


Su origen se remonta a hace 90 millones de años, cuando la Ciudad Encantada formaba parte del fondo del mar de Thetis. Se trataba de aguas tranquilas, lo que propició la deposición de sales, en especial carbonato cálcico.


Al final del Cretácico y como consecuencia de la orogenia alpina, el mar se retiró y el lecho marino, compuesto de piedra caliza, emergió a la superficie. Miles de años de acción del agua, del viento y del hielo hacen que hoy podamos contemplar este impresionante fenómeno geológico




La información que a continuación detallo esta obtenida de la web "rutasdelascaras.com"

FORMAS MÁS REPRESENTATIVAS
Todas tienen un cartel que las define perfectamente.
El Tormo Alto. Monolito de 20 metros, milagro o juego de equilibrio, emblema de la Ciudad Encantada.
Los barcos. Tres enormes moles de piedra, una flota invencible anclada en la sierra.
El perro. Guardián de una ciudad petrificada, asemeja un fox terrier.
Cara del hombre. Monumental busto de nariz aguileña y boina.
Puente romano. Arco horadadazo en la roca, arquitectura natural.
La foca. Enorme figura imaginaria que representa una foca haciendo juegos malabares con su hocico.
Los Osos. Enormes pedruscos que recuerdan dos osos.
El tobogán. Estrecho y largo callejón rocoso de varios desniveles.
El mar de piedra. Plana y extensa superficie rocosa donde la erosión del agua creó formas que simulan olas y ondas marinas. 



 Lucha del Elefante y el Cocodrilo. Enormes y caprichosas rocas, asemejan la encarnizada lucha de un elefante que lanza su trompa a las fauces de un cocodrilo.
El Hipopótamo. Inmensa roca zooforma que recuerda un hipopótamo.
El Convento. Un arco ojival en una pared rocosa nos transporta a la edad media.
Los Hongos. Entre los pinos enormes bloques de piedra asemejan hongos gigantes.
El Teatro. En un escenario natural un curioso puente recuerda la embocadura de un teatro.
La Tortuga. La abertura en lo alto de una inmensa roca parece una tortuga con su cabeza fuera del caparazón.
Los Amantes de Teruel. Bloques de roca que parecen los bustos de un Hombre y una mujer intentando besarse.





Aunque en estos días de diciembre el frío es persistente, nosotros bien abrigados paseamos por esta maravilla de la naturaleza, en el que por momentos parece trasladarnos a parajes de aquellas películas de aventuras y de ciencia ficción.


A cada paso que damos no dejamos de maravillarnos de todas estas formaciones, que aunque muchas de ellas ya tienen nombre definido, con nuestra imaginación podemos también bautizar a otras tantas formaciones.


A veces, y al asomar por una de sus grandes rocas, parece que al instante siguiente algún animal de la prehistoria aparecerá ante nuestros ojos.



Algunos bosquetes de altos pinos, dan otro toque de encanto a toda esta zona, que sin lugar a dudas es uno de los rincones mas hermosos de España.



Este mágico lugar que se encuentra a solo 36 km de Cuenca y al que se puede acceder fácilmente en coche, no puede dejar de visitarse si se viaja por esta zona de España.



Su naturaleza, sus caprichosas formaciones...sin lugar a dudas merece la pena visitarla.



Abandonamos la "Ciudad Encantada" y seguimos avanzando hacia el norte para ahora hacer un poco de montaña.

jueves, 30 de marzo de 2017

El Torcal de Antequera (Málaga) Febrero/2007


EL TORCAL DE ANTEQUERA

El valle de las figuras encantadas 



 Con una densa niebla, el paraje escondido, oculto, sin querer asomar. Tras algunas horas, el espeso manto opaco, poco a poco se alza hacia el cielo. Debajo, grandes figuras  aparecen con cientos de formas caprichosas. Estamos en el Torcal de Antequera.


Datos de interés:


Provincia: Málaga.
Extensión: 1.171 Has.
Altitud máxima: 1.369 m.
Altitud mínima: 800 m.
Régimen de protección: Paraje Natural;
Accesos: Desde Antequera, por la C-3310 se desvía hacia el torcal antes de llegar a Villanueva de la Concepción.
Grupo de senderismo y montañismo de Dos Hermanas: Señal y camino, www.senalycamino.es


Este paraje natural de 20 kilómetros cuadrados, ubicado a solo 13 de Antequera, en la carretera que la une con Villanueva de la Concepción. Famoso por las caprichosas formas que los diversos agentes han ido modelando en sus rocas calizas.


Para visitar este paraje, podemos optar entre dos rutas distintas. La verde con un recorrido de 1,5 kilómetros y 45 minutos de recorrido, o la amarilla de 3 kilómetros y dos horas de recorrido. Ambas parten del mismo lugar y se vuelven a encontrar pasado algún tiempo.


Los caminos serpenteantes suben y bajan, atraviesan grandes cañones, grietas, valles, frondosos humedales, y siempre, por todas partes, grandes rocas, con formas caprichosas, insinuantes, decoran el paisaje.


Tras una serie de ascensos y descensos por un terreno quebrado, se atraviesa un profundo callejón, en el que se localiza una buena representación de la vegetación originaria de El Torcal.



Abundan los majuelos, hiedras, madreselvas, tomillos, encinas y arces.  Al final del recorrido amarillo, se alcanza el mirador de las Ventanillas, desde el que se divisa todo el valle del río Guadalhorce. En este último tramo del recorrido, y en una pequeña hondonada, cerca del mirador, el apilamiento de rocas con formas redondeadas, nos dan sensación de estar en un lugar diferente, único, excepcional.





Pero no basta con verlo desde abajo, hay que subir. La vista desde aquí es espectacular. Rodeado de grandes paredes, y con los buitres revoloteando sobre nuestras cabezas, no nos cansamos de mirar, de observar, y de pensar, como la naturaleza nos puede sorprender con una geología tan maravillosa. Aquí, la huella de algunos fósiles marinos, nos dan una muestra clara de lo que fue este lugar hace millones de años.














martes, 28 de marzo de 2017

Cañón del río Lobo (Soria) agosto/2007


El Cañón del río Lobos, Parque Natural, es un desfiladero de 14 km. de longitud situado en la sierra de Nafría. El cañón, la diversidad de su fauna y el paisaje de cantiles son lo más destacable de la zona protegida.


Es uno de los relieves que se interponen entre la Meseta Central y el Sistema Ibérico. Su clima continental ha generado una vegetación de chopos, sauces y sabina albar. Entre la fauna destacan el buitre leonado y el lobo ibérico. Merecen atención los anfibios y reptiles. La erosión provocada por las aguas ha hundido el lecho del río. Por las laderas del cañón, que pueden alcanzar los 100 metros de altitud, baja el agua de las fuentes con el color oxidado de las paredes.


El río viene encajonado desde Burgos y continúa horadando las calizas cretáceas en Soria, recorriendo más de 25 Km.  Este espacio natural fue declarado Parque Natural en 1985 y comprende una superficie de 9580 has.


La formación más espectacular es el propio Cañón fruto de la doble acción erosiva, de desgaste y, sobre todo, de disolución de la roca por el agua, siendo más vivo el hundimiento del lecho al ceder las grutas subterráneas, por lo que aparecen las típicas zonas cóncavas o lermas en los flancos del cañón, que además son muy vistosas por los teñidos de óxidos y aguas que escurren.




Este espacio protegido, Parque Natural, situado en el este de la provincia de Soria, queda dividido entre las provincias de Burgos y Soria pero tiene en esta última su tramo más destacado. Pertenece a los términos municipales de Hontoria del Pinar (Burgos), Ucero, Nafría de Ucero, Herrera de Soria,
Casarejos, San Lorenzo de Yagüe y Sta. María de los Hoyos (Soria).



En Ucero aparece el centro de interpretación del Parque (petición de permisos) y cerca de éste sale un camino que se introduce en el espacio protegido hasta la ermita de S. Bartolomé. Desde aquí a pié. Por otra parte, la carretera entre Sta. María de los Hoyos y S. Leonardo de Yagüe salva el cañón con un puente, el de los Siete Ojos, del que parte una senda que también se adentra en el desfiladero.
"Si todo el Cañón del Río Lobos embelesa, lo que más fascina es el enclave en el que está situada la actual Ermita de San Bartolomé o San Bartolo, como la llaman popularmente. La actual Ermita es heredera de una abadía de la que se tiene documentación a partir de 1477. Anteriormente, y según la tradición, debió ser la iglesia del convento templario de San Juan de Otero.








En piragua por las Hoces del río Duratón (Segovia) Agosto/2007



Corría el mes de Agosto, cuando Joaquín, Rufino y yo planeamos una semana de montañas por el norte de España. En el trayecto paramos en este hermoso lugar: las hoces del río Duratón.


Recorrer este hermoso cañón es bueno divisarlo desde varias perspectivas, y esto es lo que hicimos nosotros. Primero por el río en piraguas y después a pie por la parte alta del mismo.



El paisaje de las Hoces del Duratón  esta dominado por la roca caliza originada  hace 140 millones de años, por la acumulación de sedimentos en el lecho del antiguo mar que por aquel entonces inundaba toda la actual península Ibérica, hace aproximadamente unos 50 millones de años, los movimientos de las placas tectónicas hicieron que dicho mar emergiera, dando lugar a la actual península y a las montañas que conocemos en la actualidad, los Alpes, los
Pirineos, etc. Esos sedimentos marinos dieron lugar a la formación de rocas calizas, que con el paso del tiempo y por efecto del agua y las condiciones climatológicas se fueron fragmentando y desgastando dando lugar a las actuales hoces, este proceso de carstificación ha permitido que el cauce del Duratón se encaje entre impresionantes paredones verticales, que en ocasiones llegan a los cien metros de altura.
En los paredones se han ido formando oquedades siendo  utilizadas desde la antigüedad tanto por el ser humano  como por la fauna. En la actualidad estos huecos son utilizados por los buitres para su nidificación.



Sin duda uno de los motivos de visita, es el espectacular paisaje de las Hoces del Duratón, pero el principal por el cual se ha convertido en Parque Natural, es por su diversidad animal y vegetal, a lo largo del río podemos encontrar distintos ambientes, creados por la diversidad climática y por los distintos tipos de suelo, podemos distinguir la paramera, el bosque de ribera y los cortados, en la paramera podemos observar  bandas de lúganos, jilgueros, pardillos y pinzones, incluso alguna garza real.


Pero el representante principal de la fauna de las Hoces es el Buitre Leonado, este ave con una envergadura entorno a los 2.5 metros y con un vuelo majestuoso es el rey de la comarca y atractivo principal del Parque Natural, anida en los huecos de los cortados y las buitreras son fáciles de distinguir por las manchas blanquecinas debidas a los excrementos de estas aves.


El Buitre Leonado es un ave que forma comunidades, esto le favorece a la hora de buscar su sustento, la colonia se organiza de forma que cada individuo cubre una basta zona sobre la cual vuela en círculos atento a cualquier indicio de carroña. En estas búsquedas el buitre puede recorrer largas distancias, favorecido por su gran envergadura alar, que le permite aprovecharse de las corrientes de aire caliente, el buitre puede estar volando horas con un gasto energético mínimo.
La población actual de buitres en el Parque Natural ronda las 250 parejas, pero gracias a las actuales condiciones, esta cantidad se esta incrementando año a año, la época de cría del Buitre Leonado es de enero a julio pero dado que en dichas fechas es muy sensible a la presencia humana, se recomienda que las visitas a la zona sean respetuosas con el entorno de estas majestuosas aves, procurando no sobresaltarlas en ningún momento.
  Pero el Parque Natural contiene otros elementos interesantes que ver, uno que llama la atención tanto por el paisaje como por la posibilidad de ver a los buitres sobrevolar por encima nuestro, es la
Ermita de San Frutos, después de haber recorrido un polvoriento camino que sale de Villaseca, se llega a un pequeña explanada donde debemos dejar el coche y seguir el camino a pie, tras recorrer un par de kilómetros llegamos a un promontorio rocoso, situado en medio de una  las hoces, donde esta el Priorato de San Frutos, patrón de la diócesis de Segovia.



A un lado podemos ver el pantano de Burgomillodo, donde acaban las hoces y al otro un espectacular cortado sobre el río Duratón, en el paredón que se encuentra enfrente se puede distinguir una gran buitrera, de la que constantemente salen los buitres que sobrevuelan por la zona, a veces incluso a pocos metros por encima de nuestras cabezas.
  Otro lugar de gran belleza son las ruinas de
Monasterio de Nuestra Señora de los Angeles de la Hoz, fue fundado en 1231 por monjes franciscanos en el lugar donde dice la tradición que Nª Sª de los Angeles se apareció a un pastor llamado Pedro. El antiguo monasterio se derrumbo en 1492,

salvo la iglesia, donde la comunidad estaba rezando maitines. Hacia 1565 fue visitado por el rey Felipe II el cual impulso las obras de reconstrucción, con la desamortización de Mendizabal el monasterio fue abandonado y en la actualidad solo quedan las ruinas, a las cuales solo se puede acceder a través de las aguas del pantano de Burgomillodo, respetando las restricciones que impone su situación dentro de la Zona de Reserva.