lunes, 9 de febrero de 2009

subida al Lucero S.Almijara-1779 m) dic/07

SUBIDA AL PICO LUCERO




Muchos caminos llegan a el, por el sur, por el norte, pero arriba, una sola senda, una senda de vértigo. Una gran pirámide preside esta sierra, contempla la blanca nieve de Sierra Nevada y el azul intenso del mar. Aquí, en el Parque Natural de la Sierra de Alhama, Tejeda y Almijara, esta cumbre junto con sus hermanos: el cisne, el cielo y otros tantos, crean un bello entorno, un placentero entorno volcado al mar.


Datos de interés:

Lugar de partida: La Resinera (950 m), carretera entre Arenas del Rey y Fornes (Granada).
Altitud pico Lucero: 1779 m
Desnivel: 800 m
Desnivel acumulado: 1200 m
Dificultad: Media-alta
Duración: 6 horas
Fecha: 08-12-07
Club de senderismo y montañismo: señal y camino www.senalycamino.es


Desde el pueblo de Arenas del rey, dirección a Fornes, una pista de tierra en la parte derecha, se adentra hacia el interior del Parque. Tras pasar el centro de información y el vivero de la
Resinera alcanzaremos el panel informativo del sendero después de varios kilómetros de pista. Junto a dicho panel, y una casa abandonada, aparcaremos nuestros coches.

En esta ocasión nueve miembros del club coordinados por Víctor emprendemos esta hermosa ruta. Manolo, Josefa, Rosa, José Manuel, Víctor, Juan, Paqui, Mario (dos nuevos miembros) y el que suscribe.


A las once de la mañana, tras ojear los mapas, ubicarnos y estudiarlos empezamos a andar por la pista. El recorrido es circular, por lo que a pocos metros de empezar, en la parte derecha aparece una senda, que es la que nos traerá del camino de vuelta.


Ahora pista arriba durante unos tres kilómetros disfrutaremos de un hermoso bosque de pinos, que antaño se usaban para extraer su resina. Una flecha indicativa nos lleva hacia el puerto de Frigiliana (1150 m, y una hora de camino) A nuestra derecha, la visión del Lucero, desde aquí, se
alza el macizo montañoso, majestuoso. Orgulloso con los restos de un cuartel de la Guardia Civil en su cima retándonos a su invasión. Una gran pirámide desnuda de roca suelta que hay que acometer con un zigzagueo ascendente.



Durante la siguiente hora el camino perfectamente señalizado por postes en algunos tramos e hitos de piedras en otros, desciende bruscamente hasta mantener el nivel, al poco la senda entre pinos busca el mirador del agua.
En este balcón, con vistas a los picos helados de Sierra Nevada, un cielo azul, el ondulado silueteo de las montañas, y detrás el Lucero.

¿Cuándo te alcanzamos? Para llegar a él, la senda ahora empieza a subir suavemente, para después volver a bajar y salvar una barranquera. Justamente al final de esta bajada hay que estar muy atento, porque al desembocar en una pista (que será la que cogeremos a la vuelta), hay una flecha que marca la senda a seguir en la parte izquierda).
La subida en este tramo se hace un poco más dura, y por un terreno más inestable, tras treinta minutos alcanzamos un gran collado. El Lucero se sigue viendo majestuoso a nuestra izquierda, pero todavía queda, ya que hay que rodearlo y atacarlo tras girar 360º desde que empezamos su recorrido.
Aquí el paisaje es espectacular, por un momento me trae recuerdos de escenas vistas en zonas del Pirineo: Altas crestas, hermosos bosques aislados de pinos, una paz infinita.
Estamos a unos 1300 metros de altura, y la senda se divisa perfectamente buscando la cima del Lucero.

El viento empieza a soplar fuertemente, en tramos incluso nos arrastra. Es un pasillo natural que de norte a sur, viene de las montañas y va hacia el mar, sin nadie, ni nada que lo frene.
Arropada tras una pequeña pared, Paqui, se encuentra mal y no va seguir, su marido Mario le hace compañía, y de forma solidaria Manolo y Josefa se quedan con ellos y empiezan a bajar.
De forma salpicada Víctor y José Manuel ya casi coronando, Juan detrás, no muy lejos Rosa, y yo, que me había quedado descolgado para saber que había pasado con el resto.
¡Qué subida más espectacular! La senda en un zigzagueo permanente sube de forma progresiva esta espectacular cima.

Esta montaña pelada, seca, donde la roca parece ser esculpida con un precioso camino, para dar paso a todos nosotros y compartir con ella tan magnífica belleza.
A pesar de un gran desnivel (unos 400 metros), no se nota, o al menos no parece cansar. Cada paso, cada suspiro, cada soplo se vive, se disfruta. El silbido del viento, los colores, el mar, la nieve. Un sinfín de sensaciones que en definitiva hacen que esta subida no te pueda cansar. Al fin y al cabo el cansancio no es más que un estimulo enviado desde nuestro interior.
Ya estoy arriba, y un cuartel de la Guardia Civil en su cima, lo preside, por supuesto de forma derruida, donde solo se mantienen en pie algunas paredes.
Hay que recordar que este era el paso natural entre Málaga y Granada, antes de existir la carretera de la costa, y el contrabando y los bandoleros eran bastante habituales por estas zonas.


Al este Sierra Nevada y Sierra Huétor, al oeste la Axarquía y la costa, y al norte el paredón de la Maroma.
Y mirando hacia el mar, el pico cisne, y cercano a él, entre ondulados montes, el cauce del río chillar y el río higuerón.

Tras casi una hora contemplando estas hermosas vistas, empezamos a descender y después de treinta minutos nos reencontramos con Paqui, Josefa,
Manolo y Mario, con los que ya habíamos quedado para emprender el camino de vuelta. Ahora ya pista abajo, después por un cortafuego, y por último una senda, regresamos al lugar de donde partimos.

Ya son l7:30, una bonita ruta, y para saborear el triunfo, una copita de brindy, y a por la próxima. Salud.

Subida a los tajos de Gomer (Málaga-1129 m) Dic/07


Se toma la A-45/ N-331 hasta Casabermeja, aquí se toma la A-356 dirección Riogordo, Velez-Málaga, al tomar el desvío hacia el pueblo subimos una pequeña pendiente, unos 300 metros y
nos encontramos con un cruce, a la derecha a 1,1 Km. Riogordo a la Izquierda a 4,5 Km. Camino de tierra, Cortijo de Auta donde dejaremos el vehiculo para iniciar la ruta.

Una vez en el Cotijo de Auta, dejaremos los coches en los alrededores, y comenzaremos nuestro recorrido a pie. Rodearemos por la izquierda el Cortijo donde se encuentra un puentecillo que cruza el río de la Cueva. Pasado el puente, veremos un carril que, entre cultivos, nos conduce,
durante 800 metros, en dirección a los Tajos de Sabar. El Tajo de Gomer es el que se presenta frente a nosotros. Tomaremos un desvío a izquierda, donde el carril llega a desaparecer, pero
nosotros debemos continuar entre campos de cultivos, respetando las plantaciones, buscando una formación rocosa a modo de torcas a la izquierda y junto a ella un vallado para guardar
ganado. En estas rocas, con paciencia, podremos localizar algunos fósiles y seguro que los niños disfrutaran saltando entre las piedras.En este punto tenemos una visión de la cara oeste del Tajo
de Gomer, por donde podremos iniciar su ascenso, no recomendada para niños pequeños. Esto alargaría el recorrido unas 2 horas y media (subida, disfrutar de la cumbre y bajada). Para
abordarla es recomendable echarnos algo de azúcar al estómago y llevar agua. Esta subida tiene unos dos kilómetros. Comenzaremos el ascenso por un embudo claramente visible, y creo que lo
mejor será que ojees la foto del álbum con el itinerario de ascenso recomendado. En su cumbre alcanzaremos la altitud de 1.129 m. Desde este punto podemos disfrutar con el incomparable
paisaje que desde allí se divisa, como los Altos del Fraile y los de Dña. Ana y las sierras de Camarolos y del Jobo, así como el corredor del Colmenar y los Montes de Málaga. Volveremos sobre nuestros pasos hasta las torcas, y desde allí descenderemos hacia el Cortijo de Fariña que divisaremos sin problemas. Una vez situados en él, comenzamos por un sendero que sale de éste y que discurre durante un kilómetro en dirección noroeste, pasando por las ruinas del antiguo cortijo del Cuartillo. En este punto cruzaremos un puente de hierro.Continuaremos ascendiendo dirección oeste hasta encontrar un carril que tomaremos a la izquierda, hacia el sur, que nos
conducirá al camino de vuelta, hacia el Cortijo de Auta. Por el camino nos encontraremos un desvío que nos lleva al nacimiento del Borbollón. Un lugar muy bonito, formado por una gran charca bordeada de variada vegetación.

Subida al Aguilón del loco, Cordillera de los Agrios (S.Cazorla-1956 m) Nov/07


CORDILLERA DE LOS AGRIOS (CAZORLA)

POR EL FILO DE LAS CUCHILLAS



….No me canso de contemplar tanta belleza, hermosas cumbres repartidas por este paisaje indómito. Sierras, picos, bosques.…. El olor me impregna, la retina brilla tanto, de tanto color, verdes, ocres, pardos...…. El viento, el frío, la nieve, el sol acaricia mi cuerpo. El silencio invade mi ser.

Cada paso, cada piedra, cada trecho, cada segundo es único, lo vivo.
Aquí arriba, rayos tenues de paz salpican a Cazorla, a las Villas y a Segura, y a este hermoso Parque, que enclavado en Andalucía, es el mayor, el más inmenso, el nuestro. El de todos.

Datos de interés:

Lugar de partida: Cañada de las fuentes
Altitud pico aguilón del loco: 1956 m
Desnivel: 800 m
Dificultad: Media-alta
Duración: 6 horas
Fecha: 24-11-07

Nos situamos en la provincia de Jaén, Corazón de Sierra de Cazorla. La carretera nos llevará como referencia a la localidad de Quesada, siguiendo la pista que nos guiará directamente al
nacimiento del Guadalquivir. Tras recorrer unos 25 kilómetros, la casa forestal de la cañada de las fuentes será el lugar donde dejaremos nuestros coches (1370 m).



En esta ocasión, ocho compañeros, ocho amigos, ocho amantes de estos picos: Manolo, Josefa, Julio, Irene, Rosa, un servidor, José Manuel y Víctor que hizo de coordinador, cogimos pista arriba sobre las doce del mediodía.

A no mucho, unos quince o veinte minutos circulando por la pista, tendremos que coger una pista que sale a mano derecha, diez o quince metros metidos en ella, una cadena nos indica que estamos en el camino correcto.

La senda empieza a subir suavemente hasta pasar un pino de grandes dimensiones, donde en su parte baja, un gran hueco hace que se mantenga milagrosamente.



Ya se empiezan a ver nuestros objetivos, aunque todavía queda para llegar.
Ahora la senda se mete en una zona frondosa y húmeda. Un gran tejo (milenario), se nos presenta ante nuestros ojos. Impresionante, y de una gran belleza. Ya llevamos andado una hora aproximadamente, al poco abandonamos la zona frondosa y subimos por la ladera de la montaña, por cierto, muy pedregosa y rocosa.


El frío hace su presencia, y algunas manchas de nieve aparecen bajo nuestros pies. Después de unos 45 minutos llegamos hasta el collado Travino (1790 m). El viento sopla fuertemente, las vistas son impresionantes, y la temperatura ha bajado hasta los 3º. Bien abrigados hicimos un descansillo para retomar fuerza. Sobre nuestras cabezas el Pico Aguilón del loco (1956 m). Ya solo tenemos que subir hacia él. La trepada es empinada, cada uno a su ritmo lo fuimos subiendo. Habían pasado dos horas desde que salimos y ya estamos aquí. ¡Que lugar!, ¡Que vistas!, ¡Que frío!, ¡Que viento! Impresionante.
En la parte izquierda (según hemos subido) una cresta arqueada, afilada, curva y de una enorme belleza. ¡Que miedo!, por ahí tenemos que tirar.
Empezamos a bajar un poco hasta enfilar estas impresionantes paredes.


¡Ojo, con mucha precaución!, el viento sopla fuertemente, tendremos que avanzar prudentemente. Poco a poco avanzamos por el filo de estas cuchillas, donde abajo, solo queda el abismo.

Tras unos quince minutos de paso, estamos cerca de Navilla alta (1914 m), pero antes tendremos que hacer una pequeña bajada, y por último subir. A nuestro paso, los árboles dejan caer la nieve, la vista de este paisaje es espectacular.



Con mucho cuidado buscamos el camino de subida, la precaución es casi permanente, ya que el suelo está resbaladizo por la nieve acumulada. Tras trepar por algunas rocas colgantes, por fin llegamos al Navilla alta.
Tendríamos que ir dirección hacia el pico del guante (1928 m) y el pico del Rayán, (1832) imposible llegar hacia ellos, es demasiado tarde, son las 15:30 y a las 18:00 la noche empezará a caer. Esta parte quedará pendiente para otra ocasión.



De todas formas aquí arriba, vemos ambos picos, medio oculto entre las nubes. Los rayos del sol juguetean con las sombras y las siluetas de las montañas. El silbido del viento. En la lejanía el blanco de algunos pueblos, el resplandor del sol, el silencio, la paz, el sentir, el placer, el VIVIR.
Desde aquí empezamos a bajar por una barranquera, hasta alcanzar el valle.


Aprovechamos para comer, ya casi a las cuatro de la tarde. El cielo está amenazador y el viento empieza a soplar fuertemente. Ruidos extraños se escuchan en la lejanía, quizás de algunos ciervos.

Por la senda del valle contemplamos a nuestra izquierda la cuerda por la que hemos pasado; arriba nos impresionó, desde aquí abajo nos sorprendió.
Disfrutando de un agradable paseo de vuelta, charlando. Sosegados, orgullosos y contentos, por haber disfrutando de un día perfecto, donde al igual que otros, perpetuaremos en nuestra mente.

A las 18:30, con las sombras de la noche invadiendo el camino, llegamos a nuestro lugar de origen, la cañada de las fuentes.